Adalides del rock oscuro de tendencia al dramatismo y letras de temática existencialista, los sevillanos Balsa de Piedra tienen ya casi perfilado su segundo trabajo, que llevará por título Soror Tenebrosa y que deberá estar listo para el otoño. Un disco que llega después de una reestructuración de la banda con relevo en la voz cantante y que viene precedido por el lanzamiento de un primer sencillo, Gólgota, disponible en plataformas digitales desde finales de junio.
Moisés Hidalgo, uno de los guitarristas del quinteto, nos cuenta que «después de un año de lo más accidentado, en el que hemos sufrido desde cambios de formación hasta una pandemia global, estamos metidos de lleno con la grabación de nuestro segundo disco, que esperamos tener acabado para final de verano«, recalca con confianza antes de argumentar el hecho de lanzar un single previo en pleno estío: «Como teníamos tantas ganas de estrenar algo después de tanto ajetreo y para hacer la espera un poco más llevadera, decidimos sacar un adelanto, Gólgota, que es lo que estamos presentando actualmente: se trata de un single de uno de los temas que serán incluidos en Soror Tenebrosa, que ha sido editado, además, junto con una versión orquestal de Perdiendo el Paraíso, una de las canciones de nuestro primer álbum«.
En efecto, el avance del disco trae material extra, que siempre se agradece, por más que la canción protagonista ya cuente con alicientes en sí misma: «Creemos, sinceramente, que Gólgota es un tema muy potente, que funciona como sencillo y que sirve de perfecta muestra de lo se encontrará en nuestro próximo álbum, un LP cuya temática girará en gran medida en torno a la religión«, agrega Hidalgo.
Para quienes deseen conocer más acerca de este proyecto, cabe recordad que Balsa de Piedra nació en 2016 por iniciativa de Manuel Juskar (batería) y el citado Moisés Hidalgo (guitarra), inspirados por grupos como Paradise Lost, Anathema o Moonspell. Mientras se parían las primeras composiciones, Daniel Parra se sumó como vocalista a un combo que quedaría apuntalado con la llegada de Raúl Schilperoort (bajo) y Chema Torres (guitarra). Ya con una formación cerrada y un rumbo bien definido, el grupo entró en el estudio en 2017 para grabar lo que sería su primer álbum, Et in Arcadia ego, compuesto por seis temas que reflejan perfectamente ese sonido de rock oscuro que la banda quería conseguir.
Tras casi dos años presentando su trabajo en distintas salas y festivales, y una vez metidos de nuevo en el estudio de grabación, Daniel Parra decidió abandonar el proyecto, por lo que la banda sufrió un parón en su actividad y se vio obligada a buscar un nuevo cantante. La búsqueda acabó unos meses más tarde cuando Juan Ríos se sumó a la formación como nuevo vocalista y frontman de Balsa de Piedra, comenzando un nuevo periodo de intenso trabajo en el que la banda retomó la grabación del que será su segundo álbum.