Os voy a nombrar a algunas bandas sevillanas de los últimos veinte o treinta años: Reincidentes, Señor Chinarro, Psicotrópicos, Desahogados, Rhinozeros, Viva Zapata… seguro que leyendo estos nombres se os vienen a la mente tiempos muy buenos, en los que tu juventud de entonces, aliada con la calidad de la música que estos grupos facturaban, hace ahora que te estés trasladando mentalmente a tiempos mejores. Si es así estás de enhorabuena, porque varios músicos de los que daban vida a aquellas bandas se unieron hace un par de años y se han dado a conocer ahora en una nueva a la que han puesto de nombre Coyote Zora, el mismo que el de la super heroína del norte de México que ellos mismos han inventado y que es la figura que encarna la declaración de intenciones de esta banda. «El nombre Coyote Zora surge de una lluvia de ideas. Para dotarlo de contenido, se nos ocurrió inventarnos una trama de ficción que reflejase algunos conceptos que revolotean en nuestro pensamiento. En el marco de un viaje a México y con ánimo de reivindicar la feminidad, aparece el personaje de esta historia, una mujer que conocedora del medio y elevada a la condición de super heroína, guía y ayuda a grupos de inmigrantes, que en busca de una vida mejor son abandonados a su suerte por las mafias que operan en el contorno de la frontera mexicano-estadounidense. Una crónica de solidaridad y superación con la que nos sentimos plenamente identificados».
Quien nos ha contado el fantástico origen del nombre y del concepto de Coyote Zora ha sido Candi Murillo, que toca una de las guitarras y canta en esta banda que junto a él forman Nacho Pujol en la otra guitarra y los coros, Daniel Risco al bajo y Manuel Escacena a la batería. Durante los próximos meses iremos conociendo canciones y videoclips de ellos hasta conocer completamente el EP que lanzarán en formato físico cuando las circunstancias actuales les permitan comenzar a dar conciertos. Pero desde ahora han creado su perfil con la primera de esas canciones, Sin saber lo que falta, que como resultado de la alianza entre Coyote Zora y Beatclap, una nueva distribuidora digital que está teniendo muy buena acogida, tienes ya disponible en las habituales plataformas de escucha.
Sin saber lo que falta se grabó a finales del 2019 en Zoraestudio, el mismo lugar en el que ya entrados en 2020 la mezcló Alfonso Espadero para posteriormente masterizarla Jordi Gil en los estudios Sputnik. Como veis, la canción no ha podido pasar por las manos de mejores técnicos. Y el resultado ha sido sobresaliente. Por su parte, ellos cuatro vienen largos de energía e intensidad, golpeándonos con su fusta como al caballo que mencionan en la canción… cabalgando a lomos del caballo ganador; ya que he llegado hasta aquí, mi intención es seguir así… somos lo que somos… y lo que son es una banda de potente rock, con los atavismos del grunge, plena de sentimientos increíblemente directos, expresados con entusiasmo no solo a través de la música que hacen, sino de la letra que canta Candi, de la que también nos habla aquí: «La letra de Sin saber lo que falta se resume como una oda a la esperanza, como el paradigma de la justicia universal, a la que en algún momento de nuestra vida diaria apelamos cuando nos hemos sentido oprimidos, y sobre todo oprimidas ellas, cuando el paso del tiempo evoca una cuenta atrás, cuando, en paz con uno mismo, nuestra existencia nos pone a prueba, o nos fuerza a superar nuestros propios límites, casi siempre impuestos por una sociedad cruel, infame y desprovista de empatía».
El que la banda se formase en 2018 y no haya sacado su primera canción hasta ahora es consecuencia de dos hechos concretos, de los que nos habla el otro guitarrista de la banda, Nacho. «Queríamos estar muy preparados cuando nos diésemos a conocer y durante este periodo todos hemos estado trabajando en giras; así que no teníamos tiempo. Ahora con la pandemia, que sí lo tenemos, nos hemos dicho que ha llegado el momento». La espera ha merecido la pena porque han dejado atado y bien atado un sonido propio y bien definido. «Y además hemos dispuesto del tiempo suficiente para trabajar en el montaje de nuestro estudio, que hemos estado un año y medio terminándolo y por fin ya lo tenemos listo».
En ese estudio del que Nacho nos habla es en el que han grabado tanto este Sin saber lo que falta como otras cinco canciones más, que serán las que vayamos conociendo en los próximos meses; en un proyecto que está a plena marcha, como también nos asegura Nacho: «Aparte de estas seis canciones ya grabadas tenemos otras seis más que vamos a grabar próximamente. Aunque la pandemia esté ahí nosotros vamos a currar a muerte. No queremos pensar en los problemas actuales porque eso nos desanimaría más de lo normal».
Ambición y fuego, dos componentes esenciales en una nueva banda de rock, aunque esté compuesta por miembros de tan largo recorrido como los de Coyote Zora. Y lo que hace que su primera canción sea tan buena no es solo lo bien que encaja en esa trayectoria que ya conocemos de todos ellos, sino que ninguno de ellos se recrea en el exceso; su música, al menos la que conocemos solamente por Sin saber lo que falta, es sencilla y directa, nos lleva a los oyentes tanto al mundo reivindicativo de los Reincidentes como al mundo más retorcido de los Rhinozeros, y no se detiene. Su alegría y su agresión se entremezclan hasta el punto en que es difícil distinguir los dos enfoques. Larga vida a Coyote Zora, salvadora de vidas, la una, y salvadores de almas, los otros.