En esta tremenda e inexperimentada tesitura en que nos encontramos en el presente por mor del dichoso covid-19, de poco o de nada sirve hacer planes, ni siquiera a corto plazo. Todo lo previsto se puede ir al carajo en un instante. De ello nos habla No hay un plan, la tercera de las canciones que saca a la luz el cuarteto sevillano Kalishkla, clasicismo jazz con texturas modernas que os presentamos a mediados de diciembre a cuento del lanzamiento de Un poco más fácil –antes debutaron con Buen vivir–; temas que conectan entre sí y que nos impelen a una manera de vivir más natural, menos encorsetada.
En sus redes, la banda alude al leit motiv «improvisar sin olvidar la meta» como plan alternativo cuando no hay plan, aunque la receta que proponen para seguir adelante, para salir airosos del momento actual, bien podría traducirse en la adición de introspección + improvisación, esto es, mirar hacia el interior, confiar en lo que somos y dejarse llevar. «La canción fue escrita en pleno confinamiento y habla de una mirada hacia nuestro interior, hacia nuestra conciencia. En esos días que vivimos encerrados en nuestra casa hicimos un verdadero viaje hacia nosotros mismos, fueron días muy reflexivos», refrenda Lolo Conde, vocalista y compositor de los temas de Kalishkla. El otro artífice e impulsor de este original y refrescante combo es el danés afincado en nuestro país Óscar Álvarez Rifbjerg, a las teclas del piano, quien agrega lo siguiente: «Personalmente pienso que no siempre hay que tenerlo todo planeado y esta canción me invita a recordarlo».

Invitación que queda patente en tres bellísimas estrofas de la canción de idéntica estructura, que reproducimos a continuación, aunque no son consecutivas:
Mira, siente, oye // rompe las rutinas que te atrapan // Piensa, habla, crece // busca la sonrisa en lo pequeño
Frena, palpa, ríe // siente los suspiros del silencio // Arde, quiebra, muerde // rómpete por dentro y si te duele
Canta, baila, grita // no dejes de poder ilusionarte // Anda, corre, vuela // ya se quitó el lastre, ya no pesas
Álvarez explica al respecto: «Técnicamente en esta pieza veo dos paisajes, el principio presentando el mensaje y la parte de improvisación donde entramos en un segundo estadio. La armonía cambia y con ello el sentir del tema. Los planes cambian». Se refiere a los tres minutos finales de la canción, en los que el piano adquiere protagonismo en un diálogo con la batería del virtuoso Jimmy González, primero con unos suaves toques de platillos y después con los más potentes bombos; siempre con el bajo de Santi Camps como casi imperceptible acompañamiento.
Este No hay un plan es «una de las cinco canciones que grabamos en Tempo Estudios y que formarán parte de nuestro EP, el cual se está mezclando en estos momentos y verá la luz dentro de muy poquito«, avanza Lolo Conde. La producción del mismo es obra de la banda junto a Fabián Romero, en tanto que Brocha Gorda Films. se ha encargado de la realización del vídeo. Óscar Álvarez detalla el siguiente paso que dará Kalishkla: «Este es el segundo de los tres vídeos que saldrán de nuestra grabación en directo. Tan sólo nos quedaría por estrenar un último vídeo de la canción titulada Camino a Casa«.
Así, pasito a pasito avanza este grupo que juega en un espacio donde se dan la mano la improvisación y dulces melodías que evocan vivencias de la condición humana. Y que no ambiciona mucho más: «Para nosotros es una gran alegría poder seguir mostrando más de nuestro trabajo. Tenemos claro que la única manera de sentirnos felices es hacer lo que hacemos. Es decir, para nosotros ya es un éxito poder hacer nuestra música en estos tiempos que corren«, afirma convencido Conde, que ansía de todos modos el regreso a lo anterior: «Evidentemente estamos deseando salir al escenario, pero no sabemos cómo será ni cuándo será«. Incertidumbre que comparte Álvarez: «Estoy de acuerdo con Lolo. Es sin duda un paso más y un paso necesario. Dentro de muy poco habremos desplegado la primera tanda de música que representa a este grupo. Estamos trabajando en un largo repertorio de música original que con suerte podremos mostrar en un futuro muy próximo». Seguro que sí, no hay otro plan mejor.