Los estudios polirrítmicos de Conlon Nancarrow, trasladados desde los originales para piano hasta el contrabajo y la guitarra flamenca; la teoría del caos y el minimalismo de Steve Reich… en ese mismo orden de cosas Marco Serrato y Raúl Cantizano desarrollan un nuevo lenguaje musical en este disco, Tiento madera, que han lanzado hoy mismo a través del sello tsss tapes, en formato de cassette y para descarga digital desde la página de Bandcamp del sello. Diez piezas en las que la música parece evaporarse en los alcances más altos de la guitarra de Raúl o se tambalea en sus profundidades más bajas, a las que Marco las lleva.
Raúl Cantizano es uno de los principales exponentes del flamenco heterodoxo. Colabora habitualmente con todos los intérpretes de flamenco que llevan sus registros y posibilidades más allá de donde la razón de los cabales aconsejaría, y de esa forma le hemos visto y oído con El Niño de Elche, o hace apenas cuatro meses en el singular Monkey Week pasado, rebuscándose entre ritmos electrónicos y samples junto a Los Voluble. Siempre moviéndose entre el flamenco, la improvisación y el rock más ecléctico.
Marco Serrato es sobre todo conocido como bajista de Orthodox, aunque también es de los músicos locales pioneros en el ámbito de la improvisación libre, en la que lleva años moviéndose. Últimamente le hemos visto colaborando de forma puntual con artistas de flamenco como Israel Galván o Tomás de Perrate, apoyándole en su unión de lo viejo y de lo nuevo, de la tradición y la vanguardia.
Hace unos meses, el percusionista italiano Francesco Covarino, responsable del sello tsss tapes, les propuso a Marco y Raúl la idea de formar un dúo y grabar una sesión de improvisación para editarla en su sello, a lo que ambos accedieron encantados. El 18 de octubre de 2020 la grabaron en los estudios Happy Place con Nacho García a los controles, quien también hizo la mezcla y la masterización posterior con la que hoy se ha editado.
Antes de que todos hayamos podido escuchar este Tiento madera en los reproductores de nuestras casas algunos afortunados tuvieron ocasión de escuchar su recreación en directo, el pasado día 14 de este mismo mes de marzo, en el que fue el último de los eventos celebrados en La Casa Ensamblá. Como quiera que no pude estar allí pero me gustaría tener la oportunidad de apreciar estos sonidos en un concierto, le pregunto a Marco si van a repetir la experiencia. «Es posible que sí. Este tipo de discos de improvisación no es como los de pop o rock, que se hacen, se presentan… pero queremos seguir tocando juntos siempre que haya posibilidad de hacerlo; de hecho puede que pronto estemos en directo de nuevo los dos improvisando. Lo que sí tenemos claro es que vamos a seguir colaborando en todo lo que podamos porque nos hemos entendido muy bien y nos gusta tocar juntos».
Los futuros conciertos de Marco y Raúl, aunque se ajusten al espíritu de lo que hay grabado en este Tiento madera, nunca serán del todo iguales debido a la improvisación, que en realidad es la razón de ser de este proyecto conjunto. Escuchando el disco vemos cómo han superado el desafío de poner el poder emocional y evocador que tienen estas piezas en el centro de atención, más allá del virtuosismo con el que las interpretan, y tampoco dejan lugar a dudas sobre la deslumbrante originalidad y la importancia perdurable de la música, aunque se muestre en sus formas más radicales y subversivas.
Tiento madera explora nuevas posibilidades de tonos y afinaciones, y aunque nos resulten más o menos familiares los de piezas como Contraveta, en la guitarra, o Brillito y gloria, en el contrabajo, con algo como Cuerda pelá o el Palosanto del final de la obra podemos comprobar que Marco y Raúl no se atan a conceptos musicales clásicos y sus dedos establecen en sus respectivos instrumentos nudos rítmicos y unidades armónicas asombrosamente cambiantes.
A mí me parece percibir en algunos momentos como transforman melodías en patrones, sin embargo Marco no está de acuerdo en esta apreciación. «Hemos huido de las melodías y patrones. Es una música tan libre que es difícil analizarla con parámetros convencionales, sobre todo si el que la oye no tiene conocimientos teóricos. Básicamente los nuestros son recursos y pensamos más en sonidos que en notas o melodías; de hecho se intenta evitar todo lo que suene a cliché. La impro libre, aunque se llame libre, tiene también sus códigos; es difícil pensar en una estructura que se repita, pero sí que se crean pasajes y hay recursos que se mantienen durante algún tiempo o que se rescatan más adelante o más atrás, y claro, se pueden percibir ciertos amagos de estructuras que surgen, pero ya te digo que no hay en ningún momento una voluntad de agarrarnos a una melodía. Es verdad que en algún momento tú notas que sobre todo yo con el contrabajo me agarro a veces a una especie de melodía, pero siempre la voy deformando y haciendo que no se perciba como tal, sino que me sirve como material sobre el que poner sonidos e ir variando, pero la intención es que nunca esa melodía cobre protagonismo como melodía en sí, sino como excusa o soporte sobre el que variar los sonidos».
Y como tras esta masterclass es difícil aportar nada nuevo, pongo aquí el punto final y os invito a escuchar de nuevo Tiento madera con la mente abierta y la herramienta para su comprensión que nos facilita Marco Serrato en ese párrafo anterior.