Llegando a su fin el año 2020 os presentamos aquí a Morleys, el proyecto en el que se había embarcado casi dos años antes el utrerano Josemi Hermida con el fin de rodearse de músicos para que tocasen sus canciones sin que él tuviese que depender de la sinergia que implica pertenecer a una banda. Josemi quería ser el único en tomar decisiones y hacer las cosas a su manera. Así lanzó un single y un EP entre finales del 2018 y principios del 2019 y todo quedó aparcado hasta que la relajación de las restricciones del estado de alarma permitió retomar el trabajo, fruto del cual fue la canción Titanes.
El proceso de esa canción fue un tanto complicado, porque con Alex Calero en la producción, Josemi solamente definió ideas y grabó referencias en los estudios de The Room Recording y después fueron sumándose a esas grabaciones la batería de José Bruno desde Madrid, y en los estudios Sputnik de Cádiz todos los demás instrumentos: el bajo de Fran G., las guitarras de Carlos García y los teclados de Elena Fernández, además de los coros de Pepe Berro. Como quiera que cuando presentamos Titanes me dijo Josemi que la siguiente canción de Morleys quería que tuviese el mismo hilo conductor que esta, aunque fuese otro single que también funcionase bien por separado, le pregunto si ha podido hacer realidad sus deseos con la salida ahora de No se hace por cuerdo. «Esta canción sale en el mismo contexto que Titanes; tanto la composición, como la grabación y la producción se han hecho en la misma línea temporal. Ha sido grabada en el mismo sitio, con el mismo equipo, y aunque sean canciones muy diferentes, yo quería que fueran lanzamientos independientes pero que se complementaran entre ellas al mismo tiempo; de hecho las portadas de las dos canciones son una misma situación vista desde puntos de vista distintos; me gusta darle esa continuidad a los trabajos. Como ya te conté, sí que son canciones que hablan más de mí que lo habitual, más de mi propia historia, de un trocito de mi vida. Siempre me cuesta abrirme, pero creo que esos meses de confinamiento nos hicieron mirar para adentro de otra manera y creo que está bien haberlo hecho así».
Y aunque Titanes se quedó sin videoclip de apoyo debido a diversas causas, para esta No se hace por cuerdo sí han podido rodar uno. «Es una canción que siempre visualicé sacándola con el videoclip de la mano y estoy muy contento porque el resultado se acerca muchísimo a esa idea original que tuve cuando empecé a imaginármelo, aunque siempre es muy complicado llevar a la realidad las ideas que tenemos en la cabeza. Pero se juntaron unas pocas de cosas que lo hicieron posible: conseguimos el teatro municipal Enrique de la Cuadra, de aquí de Utrera, para poder grabarlo y los técnicos resultaron ser unas personas estupendas que me echaron una mano y quedó fantástico. Lo grabamos otra vez con Manuel Núñez en la realización y producción, que fue quien me grabó los videoclips de Pura vida y de Trece en su momento, los dos videos anteriores que hicimos de las primeras canciones de Morleys».
El video tiene una estética tan minimalista como elegante, que le sienta de maravilla a la canción y a la forma de interpretarla. Y este resultado final es el reflejo de lo que dice el antiguo y sabio refrán de que no hay mal que por bien no venga. Josemí nos aclara mejor lo que quiero decir con ello. «La canción es verdad que es la balada más clara, la más recogida y me parecía apropiado tener una formación más reducida para reflejarla; pero se me redujo más de la cuenta y salimos solamente Elena y yo en el video porque la grabamos cuando no podíamos salir siquiera de Utrera. Es cierto entonces que eso nos benefició un poco a la hora de poder disponer de las instalaciones del teatro, pero no podían venir otros músicos a salir en la puesta en escena. El resultado ha quedado bastante bonito y le hace justicia a la canción».
El hilo de la conversación sobre este videoclip me lleva a interesarme también por aquel otro, de la canción Titanes, que quedó en el aire. «El video de Titanes sigue pendiente porque se nos complicaron los planes, no solo por esto de las limitaciones, sino por la propia producción del video; la idea que queríamos conseguir se nos estaba retrasando demasiado por un motivo o por otro y se nos iba a pisar con este lanzamiento de ahora. Entonces, como para este teníamos claro lo que queríamos, se podía ejecutar y entraba en los planes, nos saltamos el de Titanes y pasamos directamente a él».
Josemi se retrata en esta canción como un espíritu inquieto que avanza sin pisar el suelo en el intento de protagonizar todos sus sueños. Parece, hoy por hoy, la única manera de vencer todos los obstáculos que hay en el suelo… «Creo que ahora mismo vivimos un poquito condicionados por lo externo todo el mundo; por las cosas que no podemos controlar, y eso me marca demasiado los tiempos. Siempre tenemos cositas en el cajón, cosas pendientes de sacar, de hacer, pero he preferido tomármelo sin prisa y como además las redes sociales se me dan fatal, estoy intentando ponerme al día con lo que puedo y como puedo. Pero vamos p’alante y tenemos todavía mucho que decir y mucha tela que cortar».
Y justo por eso él, aferrado con fuerza al volante de Morleys lo va apostar todo sin miedo a perder, siguiendo el espíritu de esta fantástica canción que dice que para hacer cosas como esa hay que dejar atrás la cordura. Porque él, José Miguel Hermida, es de los que sienten el mágico soplo de la ilusión y la locura.