Punk primitivo cacharrero es como se define Vulvassur, joven banda integrada por cuatro chicas con apenas año y media de vida y que, tras algunos cambios en la formación, parece haberse asentado con Cherry y Nurix a las guitarras y voces, núcleo de un combo que completan Pan al bajo y Deby a la batería.
Este cuarteto de armas tomar acaba de lanzar su primer álbum, titulado Musho gorferío y en el que encadena una docena de pildorazos de punk sin aditivos, que son los que han pergeñado en estos 18 meses. Cuatro de ellos ya aparecían en Maketa warra, primera señal de vida del grupo hace un año y que como el nuevo disco ha sido posible gracias al apoyo de Juanma García, guitarrista en la banda de psychobilly y horror-punk Nictofilics.
Sobre aquellos temas iniciales recuerdan que «allá donde tocamos distribuíamos esa maketa metida en sobres chungos comprados en el chino y con el título escrito por nuestra propia mano junto a parches DIY (Do It Yourself)». El nuevo disco, en cambio, ya está disponible para su escucha en YouTube y en el recién estrenado perfil del combo en Bandcamp. Aunque ellas siguen fieles a la producción artesanal y doméstica: «Próximamente estará disponible en las mismas condiciones que el anterior (solo que este consta de portada, contraportada y una batería que da mieo)», advierten.
Vulvassur ha cogido carrerilla y tiene intención de seguir dando guerra: «Actualmente seguimos componiendo temas en la esquina el mal (localistán, San Pablo) y a la espera de tocar por ahí. Nuestro mayor afán es seguir propiciando espacios libres del consumo capital y comercial (que también se apodera de la música), y apoyar a colectivos que promueven esto así como crearlo nosotras mismas», señalan antes de «agradecer la participación a todas las vulvas que han formado parte de esto, ya que más de la mitad se empoderaron con nosotras y cogieron un instrumento que no habían tocado en su puta vida. También a las tías que en cada concierto forman espacios no mixtos», rematan estas cuatro chicas que ya se han ganado un hueco en la fértil y poco conocida escena punk de la ciudad, junto a nombres como Nadsat, Ruido Bruto, Yugo, Latigazo Cervical y otras más que iremos descubriendo en lo sucesivo.