- Historias del Nuevo Mañana es el sugerente título del EP de debut del joven quinteto Perdidos En Estéreo
Aunque ahora en verano cumplen dos años desde que dieran sus primeros pasos, ha sido en lo que va de 2022 cuando los sevillanos Perdidos En Estéreo, un joven quinteto integrado por Guillermo Vega (voz), Pablo De los Santos (guitarra principal), Daniel Izquierdo (bajo y coros), Enrique Lacave (guitarra rítmica y coros) y Miguel Fernández (batería y coros), han puesto todas sus cartas sobre la mesa: primero se han ido curtiendo en los escenarios de distintas salas de la provincia, caso de Malandar (junto a los igualmente noveles Endlands y Led Jeans), Fanatic (en una sesión de La Incubadora con otros grupos de corta vida caso de Nuevo Berlín, Perseidas y The Sleepover) o Totatu Music Club (acompañando esa vez a unos más expertos, Los Perversos); y, por fin, el pasado 24 de junio pusieron en circulación su primer trabajo, un epé titulado Historias del Nuevo Mañana y que consta de cinco canciones, entre ellas las dos que ya habían mostrado en la segunda mitad del pasado 2021: Torre de Babel y Ecos.
Como suele suceder con casi todas las bandas en sus inicios, este quinteto –nació como cuarteto, pero el baterista original, Javier Reina, debió abandonar y en vez de uno llegaron dos recambios– ha tenido que hacer uso del eslogan do it yourself para sacar adelante este primer disco de melodías pop-rock que remiten lo mismo a El Canto del Loco o Pereza que a Carolina Durante o Pignoise en función de si les sale la vena más dulce o la más aguerrida. El EP fue grabado, mezclado y masterizado en casa del cantante, como él mismo nos cuenta: «Allí se grabó todo, desde la primera demo hasta la última canción. No es un estudio profesional ni mucho menos pero contamos con un poquito de equipamiento y acondicionamiento acústico con el que pudimos sacar un sonido decente«, explica Guillermo Vega.

Este Historias del Nuevo Mañana habla «sobre situaciones y sentimientos que yo creo que todo el mundo ha vivido y sentido, o vivirá y sentirá; de ahí el nombre», señala el vocalista, que también como suele ser corriente ha sido el encargado de las letras: «Sí, las escribí yo. Aunque cada canción se haya escrito con una historia personal distinta detrás, todas suenan y combinan perfectamente porque cada una es un sentimiento y una historia de vida de cualquier persona«, recalca antes de pasar a describir cada uno de los temas, que en realidad son cuatro dado que el primero es una Intro: «Para nosotros cada tema es un sentimiento. Ecos por ejemplo puede ser conflicto con uno mismo, puede ser superación también, esa lucha constante que tenemos las personas con nuestra cabeza, con nuestras inseguridades y con nuestros problemas y cómo los afrontamos», añade.
El siguiente corte del epé es más introspectivo. Hablamos de Sueños de cristal: «Es tristeza absoluta, es pesimismo, incluso rabia también», enfatiza Vega antes de pasar a la penúltima canción, quizás la más inspirada del lote: «Prometeo es un subidón después de Sueños de cristal y para nosotros es un poco como rebeldía, chulería… esos momentos en los que afrontas eso que a lo mejor te hace mal, te da ansiedad o estrés», agrega. Y el cierre del disco, que fue uno de los sencillos de adelanto, es Torre de Babel, del que nos dice que «yo creo que refleja nostalgia pura, es superación, es felicidad también».

Una vez lanzado el disco, la banda continúa con paso firme, sin prisas pero sin pausa, trabajando para seguir cimentando su propuesta musical y adquiriendo tablas en el directo. De hecho, Dani –el bajista del grupo– nos confirma que ya tienen cerradas otras dos fechas para el otoño: «Tenemos dos conciertos a la vista, aunque todavía no se han anunciado», nos cuenta antes de adelantarnos y concretar: «El 8 de octubre estaremos en FunClub junto a Be Right Back y el 4 de diciembre, que cae en domingo, tocamos en la Long Rock con Nuevo Berlín y Enana White«. Nuevas alianzas con otros nombres pujantes de la escena local independiente, como tiene que ser cuando se está empezando a despegar.

Por lo demás, aunque el verano es tiempo de ocio y relax, el quinteto aprovecha algún que otro rato para avanzar hacia ese nuevo mañana que sueñan: «Estamos componiendo, de hecho este verano nos lo estamos tomando de forma tranquila para componer nuevos temas y viendo las cosas con calma. Puede ser que para estos dos conciertos de final de año tengamos ya algo nuevo que presentar», añade con entusiasmo.