- El cuarteto Invicti apuesta por el heavy metal clásico con Manowar como referente en su primer disco, Songs of Conquest, que presentan esta noche en la Sala X
El heavy metal es lo que tiene; por mucho que haya transcurrido más de medio siglo desde sus orígenes con Led Zeppelin, Deep Purple o Black Sabbath, sus valores capitales admiten escasas variaciones. Y tampoco ha llovido demasiado ni ha habido adaptaciones rupturistas desde que irrumpieran a principios de los ochenta bandas de la nueva ola como Manowar. No resulta extraño, así, que aferrarse a esa prístina esencia del metal pesado sea aún hoy, cuatro décadas después, una opción más que apetecible para las nuevas formaciones. Es el caso de Invicti, fundada a principios del año 2022 sobre la base de una banda tributo a los de Auburn llamada Aguiwar. Y lo admite sin reparos su bajista, Joey Vera, que en una extensa charla nos cuenta su visión del asunto: «Si intentas hacer un disco de heavy metal y no te suena a [Iron] Maiden, ni a Judas [Priest] ni a a Manowar es que simplemente no estás haciendo heavy metal porque eso ya está inventado. Si no suena a nada de eso, aunque pueda estar de puta madre y te puedas inventar un nuevo estilo, y tener más mérito… eso no sería heavy metal. Y nosotros aquí no intentamos tener más mérito, sino hacer la música que amamos«, zanja cuando se le sugiere que emular a Manowar podría quizás ser contraproducente a la hora de llamar la atención de los nuevos públicos de este género.
Pero vayamos en orden. Invicti es un cuarteto integrado por Dizzy Duarte (voz), Josemi Cassani (guitarra), Marta Grimaldi (batería) y el citado Joey Vera (bajo), quien nos cuenta los entresijos del germen del combo: «Nuestro grupo tributo a Manowar sonaba muy bien, pensábamos que había talento pero que estaba un poco desperdiciado. En esa época yo ya empecé a escribir un tema y casi un segundo. El cantante tenía poco tiempo, estaba estudiando oposiciones y además estaba un poquito cansado de otros proyectos que había tenido de música propia y la verdad es que no estaba muy entusiasmado con la idea. Entonces, cuando él ya tenía otras prioridades dejamos el grupo tributo. En esa época conocí al cantante que tenemos ahora, que es un chaval muy joven, o por lo menos bastante más que nosotros pero sorprende que le gusta mucho el heavy clásico, se sale mucho de lo que escucha su generación», señala en alusión a Dizzy antes de agregar: «Pensé que si le molaba el proyecto, era la hora de dejar el grupo tributo. Hablé con él y me dijo que creía en un grupo de temas propios, así que lo comenté con Marta y Josemi y nos decidimos porque todo el tiempo que llevábamos juntos y lo que habíamos consolidado sería una pena tirarlo por tierra. Todos estuvieron ilusionados y así nació Invicti».

Un nombre que escogieron después de un intenso debate al respecto: «No teníamos una idea inicial, buscábamos algo que reflejara ese sentimiento que hay en gran parte del heavy metal de ese espíritu de lucha, algo belicoso. Partiendo de ahí y tirando un poco de tópico de mitología también quisimos darle un toque más de aquí de casa, de la mitología del Mediterráneo, Hércules y cosas por el estilo, en vez de lo típico de los vikingos y demás. Una de las ideas que se nos vino a la mente fue la de invictus, pero hicimos una búsqueda en internet y vimos que había cinco o seis bandas llamadas así alrededor del mundo; entonces seguimos buscando y en un momento dado se me ocurrió que el plural de invictus que es invicti también era válido, y no solamente válido sino mejor, porque significa invictos en plural y como somos varios se nos ceñía mejor; y además el tema de las íes al principio y al final pensamos que iba a quedar mucho más chulo con la tipografía del logo. Fue verdaderamente un trabajo al que se le dieron muchas vueltas, no se dejó nada al azar«, recalca Joey.
Retomamos el punto en el que los cuatro deciden por consenso que había que apostar por una banda de temas propios. Vera continúa relatando: «A partir de ahí, yo tiré del carro y seguí escribiendo temas. Se me pasó por la cabeza seguir el guión del primer disco de Manowar por aquello de tener un patrón: voy a hacer un tema más heavy, otro más rockero, otro un poquito punkie denunciando las injusticias y problemas que tenemos en el mundo… cada vez el disco se fue haciendo más heavy y más épico como el primer disco de Manowar», dice en referencia a Battle Hymns (1982). Y ya hemos dicho al principio que no tienen reparo alguno, más bien al contrario, en señalar una influencia tan evidente y manifiesta: «Esto, junto con otros guiños que tiene el disco, era un poco por justificar de dónde veníamos. Así surgió lo de seguir el primer disco de Manowar, como intentando hacer lo que nosotros hubiéramos hecho si hubiésemos estado en sus circunstancias. Aunque la diferencia es abismal, lógicamente. Aunque Songs of Conquest, el penúltimo tema, se inspira mucho en el Battle Hymn de Manowar, si tú lo escuchas se nota que es totalmente original y hay muchas diferencias. Y lo mismo el resto del disco: recuerdan al sonido de Manowar porque es el metal que nos gusta, eso siempre va a quedar reflejado, pero se notan otras influencias: hay cosas que suenan a Maiden, otras a Accept, a AC/DC, a DIO… y además cada uno de nosotros tenemos nuestras influencias».

La idea es hacer algo conocido pero bien hecho, que no es tan sencillo. Y pone el siguiente ejemplo: «Si haces blues puedes hacer un disco que te sonará a montones de guitarristas de blues y no pasa nada; al contrario, es un mérito si alguien te dice que suenas a BB King, es un halago en realidad porque es muy difícil sonar como él y darle ese espíritu y demás. Entonces, cuando a nosotros nos dicen que somos unos clones de Manowar, aunque nos lo dicen como insulto nosotros nos lo tomamos como halago. Sabemos que hay gente que lo sabrá apreciar y luego habrá detractores, gente que te insultará, pero nos da igual. No somos una copia pero si alguien piensa que lo somos nos está halagando porque cualquiera no se pone a hacer temas a lo Manowar y que gusten y el disco está teniendo muy buena aceptación. Nos dicen: me lo puse una vez y lo tuve que escuchar tres veces seguidas, así que estamos muy contentos con el resultado», vuelve a remarcar el bajista.
Joey Vera considera, en suma, que el enfoque no tiene por qué generar rechazo: «Es una apuesta arriesgada, pero igual que si haces cualquier otro estilo; bueno, salvo si haces una mierda de reguetón, que tendrás una mayor proyección porque es lo que mucha juventud escucha por desgracia. Pero creemos que hay un público de heavy metal clásico de toda la vida que sigue estando ahí, escuchando discos y yendo a festivales, que se encuentra un poco que no tienen un paso de testigo. Hay muy pocos grupos que sigan manteniendo viva esa música y por eso se siguen quedando con los de toda la vida. Yo creo que si llegamos a los oídos de ese público, el disco va a funcionar y va a gustar. Esa es nuestra apuesta. Sarna con gusto no pica, estamos haciendo una cosa porque nos gusta poniendo mucho esfuerzo, muchas horas y dinero de nuestros propios bolsillos, pero intentaremos llegar con ello lo más lejos posible, como dice la canción, no nos rendiremos«, advierte.
Hacemos un receso en la entrevista para dar detalles de ese disco al que alude y que les satisface tanto, que como se ha dicho se titula Songs of Conquest y consta de nueve cortes autoproducidos, los cuales se escriben y graban en el transcurso del año 2022 para luego ser mezclados y masterizados en Estudio Pelícano con Jesús Chávez a los mandos antes de su lanzamiento, el cual se produjo el pasado 30 de enero. Y del que ya ofrecieron un adelanto en vivo cuando participaron en el SevillaMetal Fest III celebrado en la Sala Even el pasado 19 de noviembre junto a los valencianos Synlakross y a otras dos bandas sevillanas, Docka Pussel y Silveranto, en la que milita asimismo el guitarrista, Josemi Cassani.
Sin embargo, será esta noche cuando tenga lugar la presentación oficial de Invicti y de su primer álbum, en la Sala X, con entradas anticipadas a 10 euros aún disponibles en entradium y físicas en TotemTanz, Vegan Rock Sevilla y Tokatu Music Club, mientras en taquilla costarán 12 euros. Vera nos adelanta que la idea es «tocar el disco completo, y habrá alguna sorpresilla más que lógicamente no te puedo desvelar». Les acompañará una banda novel que ha irrumpido con fuerza y de la que ya te hablamos en alguna ocasión, HellHounds: «Los vi hace no mucho en la Sala Holländer y la verdad es que me gustaron, los chavales tienen muchísima energía y hacen un estilo más trallero que el nuestro y para la edad que tienen lo hacen realmente bien, si se lo siguen currando tienen un futuro por delante, una apuesta sólida», afirma Joey, que de paso ofrece su diagnóstico sobre la escena local: «De las bandas jóvenes que hay veo un poco de todo, la escena en Sevilla no está en su mejor momento pero tampoco en el peor, creo que está bien de salud y parece que va para arriba. Hubo épocas que teníamos varios bares heavies en Sevilla e incluso un sitio donde la gente se conocía y se reunía y eso ahora mismo no lo tenemos, pero sin embargo no deja de haber conciertos todas las semanas e incluso a veces dos opciones el mismo día que se hacen competencia«, asegura.
Este segundo concierto de Invicti tendrá continuidad más pronto que tarde, aunque aún no hay ninguna fecha más cerrada: «Tenemos en la manga otro concierto más y algunas negociaciones para futuros conciertos, pero la verdad es que nos está costando un poquito, aunque es normal dado que estamos empezando, nadie nos conoce aún y nos cuesta hacer el hueco. Cuando empecemos a tocar esperamos que nos vayan saliendo más oportunidades, pero de momento tenemos que darnos a conocer, no tanto entre el público, que ya te digo que está respondiendo bien, pero sí a nivel de promotores y demás», recalca.
Sorprende, y ya enfilamos el final del artículo, que la banda publicara en sus redes a principios de febrero una imagen con una especie de demo de un segundo disco cuando sólo habían pasado unos días desde la salida del debut. Le preguntamos a Joey si es que ya tienen listo el siguiente álbum, pero se ve que era más una boutade que una realidad, por mucho que, como rezaba el post citado, el metal nunca descanse. «Estamos aún bastante lejos de tenerlo terminado», comienza aclarando antes de explicar que «eso sí, ya tenemos tres canciones bastante cerradas a las que les quedan algún arreglito; y después hay otras tres a las que les falta mucho pero el germen ya está hecho, hay riffs, hay partes de letra y eso. Con eso serían seis temas y en principio querríamos incluir siete u ocho dependiendo de la duración, pues queremos que sea un disco como el primero, ligerito, que no sature y que entren ganas de escucharlo otra vez», añade antes de esbozar lo que se puede esperar de ese futuro disco: «El cambio más importante con respecto al primero será que va a haber mucha más participación del cantante en las tareas compositivas; de los tres temas que hay cerrados, dos son suyos y de los que hay empezados, uno también es suyo. Se notará que hay más de una persona componiendo. Por lo demás, creo que será un disco un poquito más heavy y con temas más oscuros, aunque no todo el disco», nos adelanta. Ya sólo resta dar fe de que estos tipos nunca se rinden, así que habrá Invicti para rato. Como el heavy metal, que se no extinguirá, claro está.