- Tinatha es una de las más nuevas e interesantes figuras del rap sevillano y presentará en el Alhambra Monkey Week su disco de este año, Empuje y arrastre
En uno de los últimos textos que he escrito hasta ahora, que no fue para esta web disonante sino para el Diario de Sevilla, decía que los raperos han dado forma a la generación más brillante de la historia de la música moderna sevillana de las últimas cinco décadas. Una generación que continúa fluyendo como el río del tiempo del soneto de Borges, enseñándonos el arte de vivir nuestra propia historia. Un río del que una de las últimas figuras en emerger ha sido la de Tinatha. Cuando me interesé por ella a raíz de la publicación de su disco Empuje y arrastre me contó que estaba en Santiago de Compostela preparando un concierto, así que dejamos pasar los días. Pero cuando salió la tercera lista de participantes en el Monkey Week, su nombre me asaltó desde la pantalla del móvil con mayor brillo que cualquier otro de los que vi, lo que me llevó a volver a contactar con ella sin dejar pasar ni un solo día más. «Pues sí, este año estoy en el circuito de showcases del Alhambra Monkey Week. Me hace una tremenda ilusión. Y estoy confirmando nuevas fechas para directos, así que estoy contenta», me dice a las primeras de cambio, llevándome a la siguiente pregunta: ¿De qué se compone un concierto de Tinatha? ¿De quién se acompaña, qué repertorio tiene, cómo llega a la gente? «Son unos once temas; empezamos con la presentación de mi último EP, que se llama Empuje y arrastre. Está publicado vía digital y cassette a través del sello Breaking Bass Records. Seguidamente vamos con el resto de mi repertorio, Tinatha Classics. Además, presento un tema nuevo y le doy unas nuevas vueltas a letras con bases guapas, como en Mis cosas favoritas, sobre la base del JoHn Muir de ScHoolboy Q. Esto me encanta hacerlo, rapear tus letras sobre otras bases a la antigua usanza. Voy con Dalila. Bueno, llevo soltando temas, colaborando, generando vídeos, pues algo de rato ya, así que es algo que se ha ido haciendo».
Ese último EP al que se refiere tiene tres piezas nuevas y los remixes de dos de ellas, y es un disco que cambia la dinámica del rap llevándolo a otro género más difícil de etiquetar, con ritmos lentos de R&B en la forma del DripDemeanor de Missy Elliott. Y al igual que esta suele contar con muchos colaboradores, Mary J Blige, Jay Z, Nelly y R.Kelly, Timbaland, también Tinatha acredita en sus canciones a Calde, Stay Puft, Novia Pagana, Absolute Terror, Fiera…
Encuentro a Tinatha en la órbita de Breaking Bass, asociada a nombres como los antes mencionados, o S Curro y Lorenzo Soria; una escena del rap diferente a la escena clásica sevillana, de raperos de Pino Montano, por ejemplo, de nombres como SFDK, Dogma Crew, Tote, Haze y a esa otra mucho más mainstream, como la de la Mala, en la que ya cuentan los Grammys, las menciones en Pitchfork… me pregunto si todos ellos hablan el mismo lenguaje y le pido a Tinatha que me hable de parecidos y diferencias, de endogamias, de exogamias entre el rap y otros géneros… «Bueno, aquí cada uno habla su propio lenguaje dentro de un estilo que sigue unas pautas reconocibles. Aparte de esto, es que Sevilla marcó para siempre muchas de las directrices de la creación y el marcaje de las pautas del estilo hardcore rap. Siempre hay una escuela que impera. Pero es que también estamos hablando de un momento concreto hace ya bastante tiempo. Nosotros no formábamos parte de la escena que se conoce como clásica sevillana. Pero formamos parte de la historia de la escena en la ciudad; como cada barrio, vaya. Yo estoy hablando en concreto de La Super K, con un estilo fresco, divertido y abierto. Directamente desde el Polígono San Pablo: Agumore –fallecido en el año 2000 a la edad de veinte años-, Gordotoloko, Boriz, Toroweins e Isra. Otro rollo. De cualquier manera todos nos conocíamos o coincidimos claro. En realidad todo estaba mezclado».
Me dice muchos nombres asociados al Polígono de San Pablo, que también es mi barrio desde 1962; sin embargo hasta hace muy poco nunca escuché hablar de Tinatha, ni de Cristina Bendala, su nombre real; por eso le pido que me hable de sus principios, de cómo empezó en esto, para darle mayor contexto. «Yo de chica patinaba en el skatepark; allí, aunque cada uno estaba en su movida, pasaban muchas cosas, todo se iba mezclando, hardcore, grunge, rap, skate, punk. Me mudé de barrio y entré a formar parte de La Marrokí, crew formada por gente del barrio El Líbano, Santa Justa y San Pablo. Graffiti, rap y skate. Estar ahí hizo que empezara a colaborar con gente en proyectos tanto musicales como de arte, de diseño gráfico: La Super K, Lijero y Paco, Joao da Silva, Dj. Zeth, S Curro, Papa Wilson, DJ. Je Main, Gordotoloko, Dj Makei; jams de graffiti, competiciones de breakdance…de hecho, íbamos a nuestro rollo haciendo nuestras cosas. Cuando lo veo desde la distancia del tiempo soy mucho más consciente de esto. El estilo de nuestra crew era fresco y sin muchas más limitaciones que la de pasarlo bien, no estábamos muy encorsetados. Me siento muy feliz de haber estado ahí en ese momento. Yo es que nunca he sido lo suficientemente rapera para un rapero, o lo suficientemente escritora de graffiti para un escritor de graffiti. Yo eso que pintaba era muy hippie. O no lo suficientemente pintora o artista por estar vinculada a la escena urbana. O lo suficientemente música de verdad porque rapeaba. Siempre he pasado un poco de todo esto, de los convencionalismos, en realidad en el fondo me da igual, me aburre bastante este tema».
Tinatha se expresa también a través de un arte diferente al musical, como nos cuenta; ella ha estudiado Bellas Artes y le pido que me cuente de forma más concreta como une esas artes con la de la música. «Es lo que te decía; en realidad siempre he dibujado más que nada. Todo se ha ido mezclando y superponiendo, bebo de todo lo que leí de pequeña; creo que leí muchísimo y eso estimuló mucho mi imaginación y poder estar totalmente a mi bola, por lo que le doy las gracias a Roald Dalh. Bebo también de las portadas de los vinilos de casa de mis padres: King Crimson, David Bowie, Janis Joplin, The Beatles. Y más tarde de todo el arte que existía alrededor del mundo del skateboard, que me dejó muy frita. Posteriormente el graffiti y mi interés por las Bellas Artes en general».
En algunos de los videos de sus canciones se pueden ver creaciones artísticas suyas. «Hay ilustraciones mías en el video de Empuje y arrastre y en La leyenda de Whatever, en el que las flores que estoy recogiendo ya casi al final de él son dibujos míos. Ese de La leyenda es un video que me encanta, sobre todo el remix de Industrias94. Las ilustraciones de Empuje y arrastre son cuatro risografías que se venden también en un pack aparte del disco».
Tiene tras de sí Tinatha una trayectoria de casi una década ya, marcada por canciones y videos como Brilla como armadura de armadillo, del 2015; La Leyenda de Whatever, del 2018; Salitre, del 2019. Yo no la conocía en esos trabajos; la he conocido ahora con Empuje y arrastre, disco en el que habla de entender la vida; dice que Alicia Nils es una catarsis, es asomarse al vacío; en Lo que brilla tanto dice que le da miedo ser débil… yo le encuentro más profundidad emocional a estas canciones que a las primeras mencionadas.
Y entre unas y otras ha habido una pandemia, con todos sus efectos. ¿Estos efectos han hecho que ella entienda la vida de otra forma y eso se refleje en sus canciones actuales? ¿Cómo ha pasado la pandemia, cómo le ha afectado, cómo ha cambiado su forma de ver la vida y la música? Tinatha me habla extensamente de todo ello. «Creo que todos mis temas tratan sobre la vida, estar atento, y sostener una capacidad de sorpresa y de apreciación. Mantener la imaginación viva, jugar y crear nuevos mundos. Y dejar todo abierto; quiero decir, que puedas entrar ahí a hacerlo tuyo. Con Empuje y arrastre pasa un poco igual pero todo es mucho más personal. Es una ruptura total. En la canción que le da título, Empuje y arrastre, hablo de alcanzar un pico, un punto de inflexión, escalar y ver, pero ver con otra visión. Lo que brilla tanto trata sobre la muerte, del sentimiento de pérdida y debilidad que produce. Alicia Nils habla directamente sobre asomarse al vacío, que es lo que estamos haciendo. Encontrar el sitio donde empieza y acaba todo. Al fin y al cabo creo que el mensaje de Empuje y arrastre, aunque no lo parezca, es optimista. Porque trata sobre estar bien solo, y de comprender que el tiempo es finito. Igualmente, este EP terminó de coger forma en plena pandemia, con ese tiempo extra que tuvimos raro para nosotros, así que creo que ese sentimiento queda atrapado en él. Las otras canciones anteriores, Armadillo, La Leyenda y Salitre hablan también de todo esto, pero el enfoque y el tiempo en el que fueron generadas fueron distintos. ¿Has escuchado Vivo dentro de una cometa japonesa? En realidad es una nana». Comprobémoslo.
Esta canción es de hace cinco años, de sus inicios; por entonces el gato estaba dentro y el ratón jugaba. Un disco define un momento de la vida del artista que lo graba. Le pregunto a Tinatha si también ha sido así con ella y Empuje y arrastre; si las letras de esas canciones, cuyo significado ella misma nos explicaba antes, son sinceras o son un texto novelado. «Es así, realmente Empuje y arrastre define o marca un periodo. La letras no son un texto novelado, no; están asentadas en mí, son proyecciones».
Proyecciones propias de Tinatha que, sin embargo, han sido recreadas con la ayuda de otros colaboradores y remezclas que no sé si están ahí porque las pedían las canciones y ha sido algo premeditado, o quizás casual ¿Cómo surgieron? Le pido que me hable de esas colaboraciones y de qué le aporta cada una. «Tenía una tremenda ilusión por crear y publicar un trabajo cerrado. Así que me dispuse a buscar música. La primera base que tuve fue la de Serokah, aka Stay Puft. Madre mía, es preciosa. Ya hicimos Salitre anteriormente y tenía unas ganas grandes de hacerme otro tema. Es el de Lo que brilla tanto. En otro momento pregunté a Novia Pagana y su base me flipó; me encanta ese tema, Alicia Nils. Más tarde, al empezar a trabajar con Calde Ramírez, de Music Komite, creamos el que abre el EP y que lleva el mismo título. Empuje y arrastre. Además, Calde construyó un pasaje para Alicia Nils que es preciosísimo. Mención especial a los remixes, en los que he tenido el placer de contar con nada menos que Fiera para el remix de Alicia Nils y con Absolute Terror para Empuje y Arrastre. Se llevan los temas a otra parte y son una barbaridad. Mi método de trabajo es bastante caótico, voy construyendo, reescribiendo, guardando, sacando, recortando… así hasta que todo coge forma o ya paro porque no puedo más».
Durante toda la entrevista no cesan de aparecer alusiones a Salitre, la canción en la que con Tinatha colaboró Stay Puft antes de Lo que brilla tanto, y que atendiendo a su dossier de prensa, en ella difuminaban los límites que separan los géneros musicales hacia nuevas expresiones culturales, hibridando ritmos latinos con toques de reguetón y atmósferas andalusíes con cierta vocación pop. Apareció en un fascinante videoclip dirigido por Claudia Ihrek.
Tinatha es una artista en perpetua reinvención, como estamos comprobando en las canciones y videos que ha lanzado desde 2015 hasta hoy, dando forma a un espacio para la multiplicidad en que ella se mueve, abarcando una amplia gama de estilos que se desvían continuamente en rumbos impensables. Cuando se inscribió en los showcases del Monkey Week, a los que deciden quiénes serán los participantes les pareció la suya una propuesta fresca y representativa de la escena más actual, que encaja a la perfección con la búsqueda y exposición de nuevos talentos, objetivos siempre prioritarios del festival.
Marcha por el camino a buen paso. Solo me queda por preguntarle, a partir de aquí, qué sueña conseguir. «Me gustaría tener una casa con una alberca grande. Con tritones dentro».